Re: Las torres de vigilancia [ZdR]

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:04

Me río levemente y me ruge el estómago-Qué hambre...-Suspiro levement acariciando mi tripa

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:05

yo no tengo hambre, comí antes de llegar aqui... *murmura:

-aunque si quieres irte, vete... nadie te lo impide

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:09

Miro a Iríadel y me acerco a ella, a su cuello-No es ese tipo de hambre...-Digo mientras acaricio su cuello, sonriendo

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:11

*se estremece un poco, pero se deja hacer como una tonta. Suelta un leve gemido, aunque era un gemido placentero sin decir nada

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:12

La dejo apoyada en una pared mientras seguía acariciando su cuello, mis ojos empezaban a tornarse de un color rojizo, leve

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:15

*lo mira a los ojos, pero no dice nada. Deja que siga haciéndolo sin oponer resistencia alguna

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:17

-Si... No quieres, detenme... Rápido-Digo, mientras la parte racional de mi cabeza hablaba por poco tiempo. Mis labios empiezan a rozar su piel

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:18

*niega con la cabeza y levanta la cabeza:

-tranquilo, no te preocupes...

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:20

Empiezo a lamer con la punta de mi lengua su cuello, mis ojos ya habían tomado esa tonalidad roja intensa, y mi parte racional, ya se había disipado en mi mente y ahora solo tenía la parte salvaje, la que necesitaba saciar

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:21

*se aparta el pelo que podría molestar. Mira la luna sin inmutarse de nada dejando que Liam se alimentara de ella

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:23

Acaricio uno de sus muslos con mi mano mientras besaba con suavidad su cuello

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:29

*nota lo que hace, pero se deja hacer. Aunque cada vez se estremecía más, que le besaran el cuello y la oreja, le gustaba muchísimo. Lo abraza por el cuello y se deja hacer

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:30

Me pego a su cuerpo mientras acaricio sus muslos esta vez con mis dos manos. Abro la boca y finalmente le muerdo en el cuello

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:37

*suelta un leve gemido, primeramente de dolor, pero luego se vuelve en un gemido placentero y cálido. Lo pega más a ella y cierra los ojos dejando que acabara de alimentarse

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:38

Terminé de alimentarme de ella y deslicé mis labios a los suyos, besándolos con fuerza y lujuria, llevándome por el lado salvaje que ahora predominaba en mi mente

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:39

*nota que la besa, pero inconscientemente lo corresponde con su misma fuerza y fiereza que la besaba él mientras la herida de los colmillos de Liam desaparecía lentamente

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:40

Seguí con el beso jugando con su lengua, entrelazándola en su boca

**Iríadel Horwave** Jue Jul 02 2009, 23:42

*corresponde a su jugueteo pero lo separa dulcemente. Traga saliba y se relame los labios:

-Liam... tengo que irme, es tarde... *le da un pico y se va

**Liam L. Doyle** Jue Jul 02 2009, 23:45

Desaparezco en el instante que ella tmbién lo hace

**Julia Cöle** Vie Jul 03 2009, 10:31

Y salgo de allí, muy cabreada. ¿Quiénes se creían que eran para hacer cosas indevidas delante de ella domida? La verdad esque solo había visto la última escena de sus 'besos' al despertar,pero fué suficiente. Me levanto me sacudo y me marcho.

**Velvet** Sáb Jul 04 2009, 22:28

Está en pié sobre el tejado de una de las torres de vigilancia, estática, estoica, casi petrificada. Observa el paisaje nocturno, deleitándose con los aromas que le trae el viento. Aromas de libertad, de lugares lejanos, mas allá de la ruinosa aldea que apesta a humano sin que encuentre ninguno, que hace que sus entrañas, que su esencia se revuelva, hambrienta y voraz para nada mas que engañarla.
Esboza una mueca de animadversión cuando recuerda el encontronazo con la iglesia, al reposar sus ojos en la oscura silueta del poblado.

**Franciszek S. Walczak** Sáb Jul 04 2009, 23:12

Su orgullo todavía continuaba ligeramente herido, desde aquel encuentro con Nar. Ahora necesitaba una manera de vengarse, algo mucho más satisfactorio que aquel simple puñetazo. En su brazo izquierdo pueden observarse las dos marcas de los colmillos. Como lo hubiera infectado de vampirismo, lo habría destrozado hasta que no quedaran más que sus vísceras derramadas por el suelo. No era violento sin razón, pero ello no significaba que careciera de capacidad de enfurecerse.
Perdido en sus cavilaciones se da cuenta de que había subido la escalera hacia el tejado de una de las torres de vigilancia. Se deja recostar sobre éste, observando el paisaje. Es entonces, cuando se percata de la presencia de alguien más, en la lejanía, parada en lo alto de la otra atalaya. La escruta con la mirada, en silencio. Ahora que sabía que no era el único ser paranormal del lugar, no podía tomarse a todos a la ligera.

**Velvet** Sáb Jul 04 2009, 23:26

El viento le trae el aroma del otro demonio en cuanto sale de las escaleras. Gira tan solo la cabeza, manteniéndose hierática en su posición, sin inmutarse por que su pelo latiguee sobre su rostro.
Lo mira con desconfianza, analizándolo en cada movimiento. Gruñe roncamente, como una advertencia velada sin que llegue a salir el sonido de su garganta, amortiguandose allí mientras frunce levemente los labios con aquella fiereza que la caracteriza.

**Franciszek S. Walczak** Sáb Jul 04 2009, 23:38

Sus ojos entran en contacto con los de ella. La analiza atentamente, podía percibir algo más, pero el viento iba hacia ella, imposibilitándole su reconocimiento. Bufa con pesar, la distancia era demasiada como para saltar hacia la otra torre.
Se queda estático. Su mirada clavada siempre en la desconocida. Relaja su expresión, volviéndola despreocupada, pero sin bajar la guardia. Curva sus labios en su característica sonrisa cáustica. Espera.

**Velvet** Sáb Jul 04 2009, 23:57

Gruñe mas fuerte al ver que el otro demonio no se mueve. Le impacienta su actitud, le enerva tener allí a un demonio que la observa inmóvil.
No va a dirigirse hacia él, pero tampoco quiere compartir aquél espacio con él. Con un ronco gruñido exasperado alza el vuelo con un lento y potente batir de alas, elevándose en el cielo hasta una altura considerable, donde empieza a dar vueltas como un ave rapaz, sin prisa, dejándose guiar por las corrientes de viento.

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